Elegir el tipo de colegio al que vas a ir es una decisión que no has de tomar a la ligera. Los internados (en inglés boarding schools) son una opción muy interesante, pues además de ofrecer amplias instalaciones y multitud de actividades y deportes, contribuyen a que los estudiantes sean más independientes y maduros.
Estas son algunas de las ventajas de las que disfrutarás si decides realizar un año escolar en un internado de EEUU:
Unas instalaciones ¡De Lujo!
Los internados cuentan con una oferta deportiva, de actividades artísticas y extraescolares amplísima por lo que las instalaciones para practicarlas son igual de impresionantes. De hecho, cada año invierten gran cantidad de dinero para que sus infraestructuras estén a la vanguardia de cada disciplina.
Si te gusta practicar de deportes, muchos de estos colegios tienen espectaculares campos de fútbol, hockey sobre hielo, golf, tenis, baloncesto, equitación… además de gimnasios totalmente equipados.
Las instalaciones para practicar actividades extraescolares no se quedan atrás. Teatros, platós, equipos de edición de vídeo y audio, laboratorios… todo lo necesario para que puedas poner en práctica lo aprendido como un auténtico profesional.
¡Atención deportistas!
Si eres aficionado a los deportes, los internados son el mejor lugar para que desarrolles tus capacidades físicas. Por lo general, los programas académicos de los internados en Estados Unidos ofrecen deportes por estaciones, es decir, cada estudiante puede participar en 3 deportes diferentes al año dependiendo de la época. Por ejemplo en invierno podrás practicar deportes de montaña o de interior (snowboard, natación, baloncesto…) y en primavera otros como tenis, vela o atletismo.
Aprende a ser más independiente
Separarte de tu familia para ir a un internado en otro país no siempre es fácil. Sin embargo, nuestra experiencia nos confirma que la mayoría de estudiantes se adaptan rápidamente y hacen nuevos amigos porque pasan más tiempo con sus compañeros de lo que lo harían en un colegio tradicional. Además, también aprenden a ser personas más autónomas y seguras pues no tienen la ayuda de sus padres.
Así pues, los internados contribuyen a que los estudiantes desarrollen un sentido de independencia que les ayudará a desenvolverse a lo largo de sus vidas. Cuando finalizan el curso escolar, tienen una actitud mucho más madura y están más preparados para la universidad.
Formación académica personalizada
Una de las grandes ventajas de los internados son las fuertes conexiones que establecen los alumnos con los profesores ya que las clases son mucho más pequeñas (15-20 alumnos por aula). Los profesores destacan por su gran vocación educativa y se convierten en modelos a seguir para los estudiantes. Generalmente, estudiantes y profesores comparten comidas y conviven en el campus, generando un vínculo aún más fuerte.
Además, recientes estudios han demostrado que los alumnos de los internados se sienten más preparados para la vida universitaria y que tienen más probabilidades de estudiar un master o un doctorado.
Amigos para siempre
Muchas de las amistades que nacen en los internados duran toda la vida. Y es que, al pasar todo el día juntos, los alumnos internos se conocen al dedillo y conviven en los buenos y malos momentos. En resumen, otro de los beneficios de los internados es la red de contactos tanto profesional como personal que establece alumno.
