Culture Shock

Culture Shock

Culture Shock

Adaptarse a un entorno extranjero tiene sus propios retos que requieren habilidades específicas para combatirlos. Por ello, debes saber cuáles son las fases de adaptación cultural, reconocer cuáles son los síntomas del choque cultural o “culture shock”, aprender estrategias para combatirlo durante tu estancia en el extranjero y reconocer cuándo necesitas ayuda.

¿Qué es el choque cultural?

Es la forma en la que te sientes y la forma en que reaccionas cuando estás inmerso en un medio con códigos culturales y sociales totalmente distintos a lo que estás acostumbrado o consideras “normal”. Suele manifestarse a través de sentimientos de malestar, ansiedad, desorientación, confusión, cansancio, irritabilidad, etc. Se relaciona frecuentemente con la dificultad o incapacidad de asimilar una cultura diferente, haciendo más difícil saber qué es apropiado y qué no. Normalmente deriva en un rechazo a ciertos aspectos de la cultura ajena.

¿Por qué se produce?

En nuestro entorno habitual sabemos cómo interpretar las situaciones que ocurren a nuestro alrededor, pero cuando vamos a un país nuevo debemos aprender cuál es el comportamiento natural de las personas que viven allí, debemos aprender a interpretar sus señales culturales, a controlar las nuevas reglas y a reaccionar de una manera que sea apropiada en esa cultura. Dos de las causas principales del culture shock son:

  • Dificultad continuada para comunicarse en el nuevo idioma.
  • Desconocimiento de los nuevos códigos y símbolos: lo que en casa interpretabas de manera automática e inconsciente, ahora necesita ser analizado con atención y esfuerzo para intentar entenderlo correctamente. Estos códigos o signos pueden ser palabras, gestos, expresiones faciales, costumbres… que forman parte de nuestra cultura, idioma y valores sociales. Estos códigos están presentes en mil y una situaciones cotidianas: cómo saludamos, qué hacemos cuando conocemos a alguien, cuándo y en qué circunstancias dar una propina, cuándo aceptar o rechazar una invitación, cómo distinguir entre una conversación seria y cuándo se está bromeando…

Puede que al principio, tu inexperiencia en esa nueva cultura dificulte este proceso. Esto dependerá del conocimiento que tengas de esa cultura, de tu habilidad para observar a la gente y de tu voluntad para aceptar esta forma nueva y diferente (¡pero no mejor, ni peor!) de hacer las cosas.

¿Cuándo se produce?

Normalmente el choque cultural se produce una vez pasada la fase de euforia inicial, cuando te das cuenta de que todas esas diferencias que te han sorprendido al llegar serán permanentes, y dejan de ser “novedades graciosas”. A veces hay una segunda oleada cuando ya queda poco para regresar a España, e incluso un “choque cultural inverso” cuando vuelves a casa.

¿Cuáles son los síntomas más frecuentes?

  • Cansancio: el cansancio es algo normal cuando te estás adaptando a tu nuevo entorno, especialmente porque estás usando una lengua extranjera y tu cuerpo necesita hacer un esfuerzo superior para algo tan básico como comunicarte.
  • Ataques de llanto: llorar sin motivo aparente o llorar por algo que, en casa, considerarías absurdo; o sentirte triste y no saber por qué.
  • Perder la confianza en ti mismo, no ser capaz de resolver problemas pequeños, sentirte inseguro….
  • Echar de menos tu casa: es algo absolutamente normal. Tienes que darte tiempo para conocer a nuevos amigos y rodearte de gente que te apoye. Si te aburres con frecuencia es que algo va mal: encuentra actividades que te entretengan.

También hay síntomas más graves y, por ello, más problemáticos: no comer o comer demasiado, estar obsesionado con la limpieza o no limpiar en absoluto, ser hostil con la familia anfitriona, sufrir insomnio…

Estrategias para combatir el culture shock

  • Conoce todo lo que puedas acerca de tu nuevo país (preferiblemente antes de irte) y pide ayuda a tu familia anfitriona.
  • No menosprecies la nueva cultura ni critiques el país delante de sus nativos: esto empeorará el problema y no te ayudará a adaptarte.
  • Encuentra un nativo en quien confíes y cuéntale cómo te sientes (un miembro de tu familia anfitriona, tu coordinador, un profesor, un amigo…).
  • Pasa todo el tiempo que puedas con nativos, habla sobre tus experiencias, descríbeles qué se hace en tu país en esa situación y explica en qué se diferencia de la cultura de ellos.
  • Ten fe en ti mismo: ¡Cree en ti mismo y disfruta de la experiencia!
  • Desarrolla al máximo estas cualidades: tener una mente abierta, no juzgar, flexibilidad, curiosidad, ser comunicativo, tener sentido del humor, motivación, independencia y no tener miedo a fallar (¡no seas muy duro contigo mismo!).

Ahora que conoces bien en qué consiste el choque cultural, prepárate bien para combatirlo y vete fuera. Conoce todos nuestros programas para estudiar en el extranjero y ponte en contacto con nosotros, ¡te ayudaremos en todo el proceso!